El gobierno argentino respondio a la protesta inglesa señalando que no se trataba de una invasion, sino de una tarea comercial, autorizada por el representante ingles en Buenos Aires, Anthony Williams, a quien la empresa Georgias del Sur S.A. habia informado oportunamente. La controversia sobre el hecho y su significacion comenzo a desarrollarse el domingo 21 de marzo y al dia siguiente, en la capital malvinense, un grupo de habitantes ataco la sede de Lineas Aereas del Estado argentino. rompiendo vidrios, pintando leyenda insultantes en las paredes e izando la bandera britanica en el mastil de la reparticion.
El martes 23, mientras en la isla San Pedro los chatarreros desarmaban calderas, maquinas y gruas, un barco britanico partia de Montevideo con 42 infantes de marina para reforzar las defensas del archipielago, aunque Londres expreso que se trataba del relevo anual de las guarniciones. Los operarios, argentinos en puerto Leith continuaban siendo vigilados por los 9 soldados ingleses, que habian tomado posiciones adecuadas. El miercoles 24, el gobierno ingles declaro que no era cierto que las oficinas de L.A.D.E., en Puerto Stanley hubieran sido atacadas por una turba y muchos menos que se hubiese izado la bandera inglesa en el edificio. El jueves 25 el "Endurance" llego a la vista de puerto Leith y se mantuvo a unos 2 kilometros de la costa.
El viernes 26, un submarino de la flota argentina partia de la base de Mar del Plata, rumbo al sur. El sabado y domingo prosiguieron las gestiones diplomaticas y el lunes 29 efectivos navales argentinos e ingleses estaban frente a frente en el Atlantico Sur. El martes 30 de marzo, en tanto en Buenos Aires y las principales ciudades del interior, se realizaba la concentracion de protesta de la C.G.T., reprimida por las fuerzas policiales, el canciller Costa Mendez declaraba que la Argentina no iba a ceder a ninguna presion y protegeria a sus connacionales trabajando en territorio argentino.
Paralelamente, nuevas unidades de la marina de guerra argentina se desplazaban hacia los mares australes y aviones de la base Comandante Espora sobrevolaban el barco ingles "Biscoe", que transportaba los refuerzos militares ingleses. Una entrevista de 3 horas entre el ministro de Relaciones Exteriores argentino y el embajador norteamericano en Buenos Aires, Harry Shlaudeman, finalizo en una atmosfera cargada de tension. El miercoles 31 de marzo, el submarino nuclear "Superb" de la marina britanica, partia de la base de Gibraltar, rumbo al Sur.
Un segundo submarino, el "Hunter Killer", juntamente con fragatas, destructores y buques auxiliares, se dirigia al mismo destino. El jueves 1º de abril, las naves de la Flota de Mar argentina zarpaban hacia el Atlantico Sur.
Aunque todos estos hechos se desarrollaban mas o menos coincidentes en tiempo y espacio, en el escenario centra de los sucesos, que habia originado todos los demas, -la isla San Pedro-, las labores de los operarios de la empresa argentina continuaban sin alteraciones, sin prejuicio de las inquietas miradas que los hombres dirigian al barco ingles, estacionado a la vista de la costa, a las noticias transmitidas por radios patagonicas, captadas en puerto Leith y a la vigilancia de los soldados ingleses. Todo se alteraria 48 horas mas tarde.