13 may 2015

Respaldo popular

El "Operativo Rosario" desato una serie de acontecimientos, internos y externos, que transformaron totalmente el panorama de las relaciones internacionales argentinas. En Londres, el gobierno britanico anuncio el rompimiento de relaciones con la Argentina, dando 4 dias habiles a los diplomaticos argentinos para abandonar el territorio ingles, el tiempo que congelaba los depositos bancarios e intervenia los bienes de ciudadanos argentinos en Inglaterra y sus posesiones. Un grupo de manifestantes ataco la sede de la embajada argentina en Londres, ocasionando destrozos y obligando a las autoridades a rodear el lugar con policias. En el Parlamentos varios disputados exigian medidas de guerra al gabinete de la señora Tacher, en tanto los vuelos de las aerolineas inglesas quedaban suspendidos hasta nueva orden. El Consejo de Representantes Permanentes de la Comunidad Economica Europea expreso su apoyo a Gran Bretaña, pidio el retiro de las fuerzas argentinas d elas Malvinas y exhorto a las partes a reanudras las negociaciones diplomaticas para solucionar el diferendo.
Casi de inmediato ingles de Defensa dispuso el "estado de alerta" de las fuerzas navales y anuncio la preparacion de una fuerza expedicionaria para recuperar el archipielago, si la Argentina no evacuaba las islas mientras la prensa inglesa destaba la diferencia de potencial militar, en favor de Inglaterra, entre ambos paises, augurando que en caso de confrontacion la ventaja estaba de parte de Gran Bretaña. En los EE.UU., donde la noticia produjo extraordinaria agitacion, el presidente Ronald Reagan revelaba su fallido intento de disuadir al gobierno argentino de la operacion proyectada, durante una conversacion telefonica de 50 minutos, la noche del jueves, con el presidente Galtieri. El mandatario norteamericano adelantaba que su pais "solo actuaria si puede ayudar en la disputa". El dia 3, el Departamento de Estado de los EE.UU. emitio un llamado al cese de hostilidades en el Atlantico Sur y aunque expresaba que "no habia adoptado ninguna posicion sobre los reclamos de las partes sobre las islas", adelantaba su reconocimiento "del hecho de la prolongada administracion y control britanico sobre el archipielago". Por su parte, la Union Sovietica se limitaba a dar la informacion de lo ocurrido, aunque algunas publicaciones atacaban a Gran Bretaña.
En lo interno, mientras se anunciaba que el ministro de Relaciones Exteriores, doctor Nicanor Costa Mendez participaria de la reunion del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para exponer la posicion argentina, la decision del gobierno recibia amplio respaldo de todos los sectores de la poblacion. En la misma jornada recuperaban la libertad el titular de la Confederacion General del Trabajo, Saul Ubaldini, otros dirigentes y activistas detenidos por la manifestacion del 30 de Marzo, durante la cual se habian producido serios incidentes. La Central Obrera, en una declaracion, daba su aval a la resolucion de recuperar la islas Malvinas, pero dejaba a salvo sus discrepancias con la politica interna del gobierno militar. La totalidad de los sindicatos, grupos gremiales y partidos politicos adopto identica posicion y alento a concurrir a la concentracion en Plaza de Mayo, prevista las primeras horas de la tarde.
Pese a la velocidad de los acontecimientos, que no daban tiempo para organizar una manifestacion en forma, miles de habitantes de la Capital Federal y Gran Buenos Aires se hicieron presentes, cerca de las 14.30, frente a la Casa de Gobierno, para expresar su alegria y su decision de reforzar la soberania nacional en las islas de Atlantico Sur. El presidente Galtieri, que dirigio un mensaje a la poblacion por los medios audiovisuales de comunicaciones, dando cuenta de la resolucion y de la determinacion del gobierno de la Junta Militar de consolidar la recuperacion de las Malvinas, saludo a la multitud desde el balcon de la Casa de Gobierno, desde donde pudo apreciar el balcon de la Casa de Gobierno, desde donde pudo apreciar el apoyo a la actitud adoptada frente a Gran Bretaña, sin perjuicio de las disidencias sobre aspectos controvertidos de la orientacion interna,