El segundo acontecimiento tuvo lugar dos años despues y por sus caracteristicas alcanzo proyeccion nacionales e internacionales de cierta magnitud, no solamente por la importancia del hecho en si mismo, sino porque en esos momentos se desarrollaban las conversaciones directas entre Gran Bretaña y la Argentina en busca de soluciones al largo conflicto por las islas Malvinas, que habian entrado en la fase del establecimiento de comunicaciones entre el archipielago y el territorio continental argentino. Y por la visita del principe Felipe a la Argentina...
La idea de ocupar, aunque fuera por algunas horas, una porcion del territorio malvinense, enarbolando la bandera argentina, nacion a principios de 1966 de conversaciones entre la pareja formada por Maria Cristina Verrier, periodista y autora teatral, de 21 años y Dardo Cabo, militante nacionalista de 25 años, que habia incursionado por el periodismo y el activismo politico. Durante casi dos años, la pareja y un grupo reducido de amigos reunieron informacion basica sobre el archipielago; caracteristicas, numero y disposicion de los habitantes, ubicacion e importancia media, posible lugar de aterrizaje de un avion (unica forma de llegar), mapa, rutas aereas y maritimas, comunicaciones, ect).
Simultaneamente con estos preparativos, se construyo un grupo "comando" con 16 jovenes militantes peronistas y nacionalistas, que fueron intensa y rigurosamente entrenados para la mision que se hablan impuesto. Junto a este grupo se formo otro, que tenia la funcion de enlace y difusion, en el que estaba un radioaficionado que, con sus instalaciones en un lugar del Sur del Gran Buenos Aires, recibira la informacion desde el avion y la transmitiria para su difusion periodistica,
El plan consistia en viajar en un avion de vuelo regular al Sur y desviarlo en el momento oportuno hacia las islas Malvinas. Para ello, los 18 miembros del "comando" abordarian la nave en forma separada, para no despertar sospechas, llevando en el equipaje individual la ropa adecuada, las armas y otros elementos necesarios para la operacion, a la que bautizaron "Condor", por ser esta el ave simbolo nacional. Ademas, unas horas antes de la partida se conecyaron con el director-propietario del diario "Cronica", Hector Ricardo Garcia, quien cubriria la parte periodistica directa del operativo, aportando el testimonio grafico y escrito de lo que aconteciera.
Asi preparados, a las 0.30 horas del 28 de septiembre de 1966 (hacia 4 meses que gobernaba el general Juan Carlos Ongania, luego de ser derrocado el presidente Arturo U. Illia, el 29 de junio) todos y cada uno de los miembros del "Comando Condor", mas Hector R. Garcia, abordaron el avion de "Aerolineas Argentinas", un DC-4, que cubria el vuelo 648 hacia Rio Gallegos y Ushuaia, partiendo desde el Aeroparque de la Ciudad de Buenos Aires. Iban en la maquina, bautizada "Benjamin Matienzo", los 4 tripulantes, piloto, copiloto, comisario y azafata, 29 pasajeros, entre ellos el gobernador de Tierra del Fuego e Islas del Atlantico Sur, que comprende las Malvinas, almirante Jose Maria Guzman, los 18 integrantes del comando y el empresario periodistico Garcia, en total 52 personas.
Cuando el aparato se acercaba a Rio Gallegos, a las 6.10, dos de los jovenes comandos, portando sendas pistolas, se introdujeron en la cabina de mando y ordenaron al comandante, Ernesto Fernandez Garcia, que tomara rumbo 105, es decir, hacia las islas Malvinas. Simultaneamente, otros integrantes del grupo sacaban de la bodega la vestimenta que iba en las valijas y obligaban a la azafata a informar por los microfonos que el avion seguiria a Comodoro Rivadavia por "mal tiempo en Rio Gallegos". Mientras los miembros del comando cambiaban sus ropas de viaje por las mas adecuadas para el clima y la situacion en las islas Malvinas, la maquina atraveso el mar y a las 7.44 avistaban la capital del archipielago. A las 8.50 aterrizaban en la pista.