En Roma, el Vaticano anunciaba que el Santo Padre, al conocer los sucesos, oro por la paz y expreso su anhelo de que prevaleciera el buen sentido entre las partes. En Iberoamerica.
Peru, Uruguay, Guatemala y Brasil daban su apoyo a la posicion argentina, en tanto el embajador argentino ante la Organizacion de estados Americanos, OEA, Raul Quijano, adelantaba que nuestro pais reclamaria la aplicacion del Tratado Interamericano de Asistencia Reciproca, TIAR, el que preve asistencia militar a cualquier Estado americano agredido por una potencia extracontinental.
En Buenos Aires, el Banco Central disponia el cese provisorio de las operaciones cambiarias en moneda extranjera, especialmente el dolar y la libra inglesa, mientras tomaban estado publico informaciones sobre el intercambio entre Argentina y Gran Bretaña, muy disminuidas en los ultimos años, con un deficit para nuestros pais. Tambien se conocieron parte de los intereses britanicos en la Argentina, entre ellos varias empresas y grandes extensiones de tierras en la Patagonia. Las autoridades argentinas dispusieron, tambien la suspension de operaciones con divisas y el pago de deudas a Inglaterra.
En la sesion efectuada el dia 3 de abril, en Nueva York, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, por 10 votos a favor, 4 abstenciones y el voto en contra de Panama, exigio el retiro de las tropas argentinas de las islas Malvinas, decision rechazada por el gobierno argentino, por "estar en contra del derecho y de la realidad historica contemporanea". Al hacer uso de la palabra en el foro internacional, el canciller Costa Mendez renovo los argumentos y las constancias juridico-historicas del derecho argentino al archipielago y al ratificar que las mismas, forman parte del territorio y la soberania nacional, expuso la resolucion de nuestro pais de defender con firmeza y prudencia sus derechos. El mismo dia, la Argentina solicito una reunion extraordinaria de la Organizacion de los Estados Americanos para tratar la cuestion.
En las Malvinas se organizaba el gobierno argentino, iniciandose la prestacion de los servicios esenciales y las comunicaciones radiales y televisivas, anunciando el gobernador militar, general Mario B. Menendez, que el archipielago no regia el "estado de sitio" bajo el que estaba el territorio continental, reiterando el respeto de los derechos civiles de propiedad y libre disposicion de los bienes dentro de las islas. Las informaciones de jefes militares y funcionarios civiles daban cuenta del desconcierto de los habitantes del archipielago y su paulatina adaptacion a las nuevas condiciones implantadas por la administracion argentina. En general, los "kelpers" miraban con desconfianza y hostilidad a los argentinos, pese a que el comando militar y el gobernador dispusieron la entre libertad de desplazamiento para los pobladores, restrigiendo a los soldados y funcionarios argentinos esos derechos.
En tanto Venezuela, Panama y Costa Rica reforzaban la posicion de paoyo a la Argentina y Peru y Bolivia ofrecian inclusive, respaldo militar, el gobierno ingles informaba que enviaria una fuerza naval y militar a reconquistar las islas, partiendo los primeros buques de guerra y auxiliares el dia 5 de abril. El Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas empezo a emitir comunicados diarios con la informacion de lo que estaban sucediendo en Malvinas y en ocasiones dando a conocer algunos desplazamientos de tropas y elementos hacia la costa patagonica, donde se tomaban los mayores recaudos militares.
La poblacion argentina se moviliso para respaldar las acciones militares y allegar medios a las tropas, remitiendo toda clase de materiales de abrigo y alimentos durables hacia los puntos de concentracion de estos, fijados por las autoridades militares. Casi enseguida comenzaron las colectas, en dinero y bienes, para conformar el Fondo de Recuperacion de las Islas Malvinas, que pronto tomo estado publico, reglamentando las autoridades los depositos y su destino. Miles de argentinos, de todas las edades, se presentaron de voluntarios para combatir, poblar las islas, trabajar en ellas, enseñas a los isleños, ect. Al asumir su cargo el gobernador de las Malvinas, en Puerto Argentino, se hicieron presentes representantes de los partidos politicos, organizaciones obreras, CGT y entidades de diverso tipo, apoyando la instalacion de la autoridad nacional en el archipielago con la unidad nacional y la determinacion de sostener los derechos argentinos.
Los paises de la Comunidad Economica Europea anunciaron la suspension de venta de armamentos a la Argentina y la aplicacion de sanciones economicas a nuestro pais. En Washington se anuncia que el secretario de Estado, Alexander Haig, efectuara gestiones en Londres y Buenos Aires para intentar un arrenglo pacifico al conflicto por las islas Malvinas, en mision de "buenos oficios", segun la calificacion del presidente Reagan y de la prensa norteamericana que, no obstante, se pronuncio casi por unanimidad a favor de Gran Bretaña, que ese mismo dia dispuso el bloqueo maritimo y aereo en un radio de 321 kilometros cuadrados alrededor de las islas considerando "embarcacion hostil" a toda nave argentina que ingresara en dicha zona. En conocimiento de esta nmedida, el gobierno hizo saber que rechazaria agresiones dentro de las 200 millas maritimas de su jurisdiccion. Cabe señalar que, dada la distancia entre las costas del continente y el archipielago malvinense, ambas disposiciones de exclusion martitima y aerea se superponian.